Amenazas

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Situación actual del conejo

Originalmente el conejo era muy abundante en toda la Península Ibérica. Sin embargo, el efecto de dos enfermedades víricas, la mixomatosis y la enfermedad hemorrágica del conejo (EHV), redujeron notablemente las poblaciones de conejo en España, llegando incluso a detectarse extinciones locales.

La mixomatosis es una enfermedad vírica de origen americano introducida deliberadamente en Francia a principios de los años cincuenta. Llega a España en el año 1954 provocando una reducción del 90% de las poblaciones de conejo. Cuando parecía que las poblaciones se recuperaban de esta epidemia, el conejo sufrió un nuevo retroceso, a finales de los años ochenta, con la aparición de la enfermedad hemorrágica del conejo (EHV) que produjo una mortandad alrededor del 60%. En total la reducción del conejo puede haber sido de más de un 80% en los últimos 30 años.

Otro factor que incide negativamente sobre la distribución del conejo, es el deterioro del hábitat. Incluso antes de la aparición de la EHV, el cambio en los usos del suelo, como el abandono de prácticas tradicionales de gestión del matorral, la intensificación de la agricultura o la concentración parcelaria afectaron negativamente a sus poblaciones. Actualmente, la recuperación del conejo sigue asociada a factores que determinan la calidad del hábitat, entre ellos el uso agrícola.

En aquellas zonas donde las densidades de conejo han descendido por debajo de cierto umbral después de las enfermedades, la presión de caza a la que se ve sometido el conejo debido al gran número de especies que depredan sobre este, pueden impedir que el conejo se recupere. Es lo que se conoce como “trampa del depredador”.

 

 Conejo silvestre

 

La caza del conejo es una de las actividades cinegéticas con mayor tradición en la península. Esta actividad ejerce una presión importante sobre muchas poblaciones de conejo ya diezmadas por los factores anteriormente descritos que no pueden soportar la presión cinegética llevándolas al borde de la desaparición.

 

Grado de amenaza

El conejo ocupa una buena parte del territorio nacional, y puede alcanzar localmente cierta abundancia. Sin embargo, la mayor parte de las poblaciones siguen una tendencia negativa. Según el Libro Rojo de los Vertebrados Españoles el conejo cumple claramente los criterios para ser considerado como Vulnerable, al haber disminuido la mayor parte de sus poblaciones más de un 30% en la última década.